Mis geranios

lunes, 2 de julio de 2012

Caracol vienés

De Viena se vino conmigo, acurrucado en un pliegue de mi maleta, un caracol de pequeño tamaño que me pidió auxilio en cuanto sintió el calor de mi mano. Sí, en vez de quedarse metido en su caparazón, sacó los cuernos y casi se me puso depié. Seguro que emigraba en busca de sol. Desde entonces vive en nuestro jardín.

Entre Múnich y Viena, junio 2012

Acabamos de volver de  tierras bávaras y tirolesas, en parte todo un viaje sentimental, pues visitamos un par de ciudades del recorrido de nuestro viaje de novios --allá, por los años del twist-- y Juan volvió a visitar su querida alma mater, en Múnich, y las famosas cervecerías donde reponía fuerzas mientras aprendía bávaro.