Mis geranios

sábado, 9 de abril de 2011

De excursión

Cuando salgo al campo, a la sierra, me doy cuenta de cuán lejana y artificial es mi vida en la ciudad; de los sonidos que me faltan y de los ruidos que me sobran.
Me gusta ver el agua del deshielo extenderse en la nava, alimentar las tempranas campanillas amarillas, ir creciendo en caceras y recogerse, cada vez más rápida, en riachuelos que van saltando entre los pinos. Es oír nacer la canción del agua...

1 comentario:

  1. La naturaleza es vida, como bellamente has definido en esta prosa poética.
    Yo prefiero vivir en ciudades pequeñas que en grandes urbes.
    Saludos

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