Ayer, 11 de marzo
Ayer, antes de la lluvia, mi calle estaba rosa de prunos en flor. Y de pronto me acordé de la tragedia de Japón. Los árboles empezaron a llorar pétalos y el cielo se contagió. Y me acordé de las víctimas de Atocha. Hoy apenas quedan flores. La belleza es fugaz...
No hay comentarios:
Publicar un comentario